Ñ

Cuando estás de viaje, tarde o temprano, tenés que comprar algo. Hay algunas expresiones que repetimos en estas situaciones y que si las conocés, te ayudan a salir del paso.

En la verdulería…

– ¡Buenos días!

– ¡Buenos días! Necesito manzanas. ¿Cuánto cuesta el kilo de manzanas verdes?

– El kilo está 12 pesos. 

– Bueno, deme un kilo. Y, ¿cuánto cuestan las naranjas para jugo?

– Están un poco caras: 24 pesos el kilo.

– ¡Uh!, no, entonces me llevo medio kilo. ¿Cuánto es todo?

– El kilo de manzanas y el medio kilo de naranjas son 24 pesos.

– Acá tiene 100 pesos.

– ¡Uy!, ¿no tenés más chico?

– ¿Más chico?

– Sí, ¿no tenés un billete de 50 pesos? porque no tengo cambio.

– Sí, acá tiene 50 pesos.

– Gracias. Acá tenés tu vuelto: 26 pesos.

– Gracias. Nos vemos

– Chau.

¿Cuánto cuesta? / ¿Cuánto cuestan?

Se usan estas expresiones para preguntar el precio de un producto específico. Por ejemplo, en el diálogo el comprador usa esas preguntas para saber el precio de las manzanas o de las naranjas.

¿Cuánto es?

Usamos esta pregunta para saber el precio total de la compra. 

Más chico

Nos referimos a un billete de menor valor.

Cambio

Si tenés que pagar 50 pesos, podés pagar con un billete de 50 (o sea, SIN cambio) o con 5 billetes de 10 pesos (o sea, CON cambio)

Vuelto

Es la cantidad de dinero extra que te sobra después de pagar. Por ejemplo, si querés compar un kilo de manzanas que cuesta 12 pesos y pagás con un billete de 20 pesos, tu vuelto será 8 pesos.