Muchas veces las expresiones idiomáticas nacen como metáforas y, al usarlas con tanta frecuencia, olvidamos su sentido metafórico y las usamos como fórmulas. Como hay tantas y son siempre muy útiles, pensamos en organizarlas en grupos temáticos. En el post de hoy: expresiones idiomáticas relacionadas con el cuerpo.
~ Tomar el pelo: Burlarse de alguien, diciéndole mentiras.
– ¡Che, recién vi a Al Pacino en el subte!
– ¿En serio?, no lo puedo creer.
– ¡Ja, ja!, no, ¡te estoy tomando el pelo!
~ Meter la pata: Cometer un error incómodo.
– Juan, el otro te vi con tu hija por Palermo.
– No tengo hijos. Ésa era mi novia.
(- Uy, metí la pata)
~ Tener el agua al cuello: Estar en una situación límite. También se puede usar la expresión: “estar con el agua al cuello”.
– Tengo que terminar este trabajo para mañana y no hice ni la mitad.
– Uh, ¿para mañana?, estás con el agua al cuello.
~ Estar con el corazón en la boca: Estar muy preocupado por algo.
Son las tres de la madrugada y Fernandito no vuelve de bailar. ¿Habrá pasado algo malo? ¡Estoy con el corazón en la boca!
~ Lavarase la manos: No tomar responsabilidad en una situación.
En la fiesta en la casa de Rodrigo, se rompió con jarrón y todos se lavaron las manos. Todos estaban un poco borrachos, nadie dijo que era su culpa y siguieron bailando.
~ Morderse la lengua: Hacer un esfuerzo para no decir algo que estás pensando.
El cliente era tan maleducado que el mozo tuvo que morderse la lengua para no insultarlo.
~ Poner las manos en el fuego por alguien: Tener absoluta confianza en una persona.
– Che, robaron $100 de la caja. Sospecho de Juan.
– ¡¡No!!, Juan es muy buena persona. Yo pongo las manos en el fuego por él.